"Cinco semanas. Ese fue el período de tiempo que el arquitecto David Chipperfield y su equipo de voluntarios invirtieron en la elaboración de un minucioso análisis económico, ambiental, social y urbanístico de Barbanza. Su conclusión dictaminó una necesaria puesta en marcha de medidas de protección del medio natural, con la ría y sus recursos marítimos como punta de lanza..."